Cada 18 de agosto, en la República Dominicana se celebra el Día del Médico, una fecha que rinde homenaje a los profesionales de la salud que con dedicación y sacrificio velan por el bienestar de la población. Esta celebración tiene sus raíces en la creación de la Asociación Médica Dominicana (AMD) en 1891, una organización que desde sus inicios ha jugado un papel crucial en el desarrollo y la defensa de la medicina en el país. La elección de esta fecha se debe a la conmemoración de la fundación de la AMD, que hoy en día se conoce como el Colegio Médico Dominicano (CMD).
La historia de la medicina en la República Dominicana está marcada por grandes logros y desafíos. Desde los primeros hospitales coloniales hasta los modernos centros de salud de hoy, los médicos han sido fundamentales en la evolución del sistema de salud. A lo largo del tiempo, han enfrentado enfermedades endémicas como el cólera y la malaria, así como pandemias globales, siempre con un espíritu de innovación y servicio.
El trabajo de los médicos dominicanos ha sido fundamental en el avance del sistema de salud nacional. Estos profesionales no solo se dedican a la práctica médica, sino que también participan activamente en la investigación, la docencia y la formulación de políticas públicas que buscan mejorar la calidad de vida de la sociedad dominicana. En este sentido, destacan figuras históricas como el Dr. Francisco Eugenio Moscoso Puello, pionero en la cirugía moderna en el país, y la Dra. Evangelina Rodríguez, la primera mujer médica dominicana, quien dedicó su vida a la atención de los más necesitados y a la lucha por los derechos de las mujeres.
En los últimos años, la pandemia del COVID-19 destacó aún más la importancia de estos profesionales. Enfrentaron una crisis sanitaria sin precedentes con valentía, trabajando incansablemente en condiciones a menudo adversas, poniendo en riesgo su propia salud para salvar la de otros. Este 18 de agosto, la celebración no solo reconoce su labor diaria, sino también su capacidad de resiliencia y su compromiso inquebrantable con el bienestar de la población. Durante la pandemia, miles de médicos dominicanos estuvieron en la primera línea, enfrentando la enfermedad con una combinación de ciencia, coraje y empatía.
El Día del Médico Dominicano es también una ocasión para destacar los avances en la educación médica en el país. Las universidades dominicanas, como la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) y la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra (PUCMM), han formado a generaciones de médicos que hoy prestan servicios tanto en la República Dominicana como en el extranjero, llevando con ellos el prestigio de la medicina dominicana a nivel global.
Además, es importante reconocer los desafíos que aún enfrentan los médicos en el país. La necesidad de mejores condiciones laborales, mayor inversión en infraestructura hospitalaria, y la implementación de tecnologías avanzadas en el sector salud son temas recurrentes en las discusiones profesionales y gubernamentales. Estos desafíos subrayan la importancia de continuar fortaleciendo el sistema de salud y ofrecer a estos profesionales las condiciones adecuadas para ejercer su labor con dignidad y eficacia.
Finalmente, el Día del Médico Dominicano es un llamado a la sociedad para valorar y reconocer el esfuerzo constante de quienes, con vocación y ética, dedican sus vidas al cuidado de los demás. Es un día para agradecer no solo por los momentos de atención y cuidado, sino también por el sacrificio personal que muchos médicos hacen para servir a sus pacientes.
Este 18 de agosto, celebremos y agradezcamos a todos los médicos dominicanos, quienes, con su conocimiento, compasión y esfuerzo, son pilares fundamentales en la construcción de un país más saludable y justo.
