Donald Trump, expresidente de Estados Unidos y candidato republicano, ha logrado regresar a la Casa Blanca tras derrotar a la vicepresidenta Kamala Harris en una de las elecciones más intensas y polarizadas de los últimos años. Trump, quien ya ocupó el cargo de 2017 a 2021, ha obtenido la victoria tras una campaña marcada por su retórica antiinmigrante y por controversias sobre afirmaciones infundadas.
Durante la campaña, el exmandatario mantuvo un discurso fuerte sobre temas migratorios, llegando a difundir teorías desacreditadas. En un debate, Trump mencionó falsamente que inmigrantes haitianos en Springfield, Ohio, comían perros y gatos, un rumor que fue desmentido categóricamente por autoridades locales. Ante la reacción, Trump se justificó diciendo que solo estaba repitiendo lo que había escuchado.
Un regreso inesperado a la Casa Blanca
La elección de Trump en 2016 lo convirtió en el primer presidente de Estados Unidos sin experiencia política o militar previa, un hecho que marcó su primer mandato. Su gestión fue definida por la crisis sanitaria de la covid-19 y una serie de controversias, incluidas las acusaciones de vínculos con Rusia, que él siempre negó. Aunque las investigaciones confirmaron que Rusia intentó influir en las elecciones a su favor, no se estableció una conexión directa con el expresidente.
Trump fue elegido en 2016 tras derrotar a Hillary Clinton, con el respaldo de una base de votantes principalmente compuesta por hombres blancos mayores de 40 años y con niveles educativos bajos o medios. Esta base electoral ha vuelto a ser crucial para su triunfo en 2024, consolidando su posición como una figura central y divisiva en la política estadounidense.
El resultado de las elecciones de 2024 marca un capítulo decisivo para Estados Unidos, con Trump listo para asumir de nuevo la presidencia y enfrentar los retos de una nación profundamente dividida.