MEDIO AMBIENTE
Cada 21 de marzo se conmemora el Día Internacional de los Bosques, una fecha proclamada por la Asamblea General de las Naciones Unidas en 2012 para concienciar sobre la importancia de todos los tipos de bosques y árboles en la vida del planeta y de sus habitantes.
Los bosques cubren alrededor del 31% de la superficie terrestre y desempeñan un papel esencial en la salud ambiental global. No solo son el hogar del 80% de la biodiversidad terrestre, sino que también actúan como grandes reguladores del clima: absorben dióxido de carbono, producen oxígeno, protegen los suelos de la erosión, y regulan el ciclo del agua.
Sin embargo, según datos recientes de organismos internacionales, el mundo pierde cada año millones de hectáreas de bosques debido a la deforestación, los incendios forestales, la expansión agrícola y la urbanización. Esta pérdida no solo amenaza especies animales y vegetales, sino que también contribuye al calentamiento global y reduce la calidad de vida de millones de personas, especialmente en comunidades rurales e indígenas.
La situación en República Dominicana
En República Dominicana, los bosques abarcan importantes zonas de la Cordillera Central, la Sierra de Bahoruco, la Cordillera Septentrional y otras áreas protegidas. A pesar de los avances en reforestación y educación ambiental, el país enfrenta desafíos como la tala ilegal, los incendios forestales y la presión del desarrollo urbano sobre zonas boscosas.
Organizaciones ambientales y autoridades nacionales aprovechan esta fecha para recordar la necesidad de seguir impulsando políticas públicas que garanticen la protección de nuestros ecosistemas forestales. También se promueve la participación ciudadana a través de jornadas de siembra, charlas educativas y campañas de sensibilización.
Bosques para el bienestar y el desarrollo sostenible
El lema del Día Internacional de los Bosques 2025, “Bosques y salud”, subraya la relación directa entre los ecosistemas forestales y el bienestar humano. Los bosques no solo son espacios de vida para muchas especies, sino también fuente de alimentos, medicina, agua limpia y lugares para la recreación y la salud mental.
Cuidar los bosques es invertir en el futuro. La protección y restauración de estos ecosistemas son fundamentales para enfrentar la crisis climática, preservar la biodiversidad y garantizar condiciones de vida sostenibles para las generaciones futuras.
Este 21 de marzo es una oportunidad para reflexionar, pero sobre todo para actuar. Porque los bosques no solo son parte del paisaje: son vida, salud y esperanza para el planeta.