Los dos mandatarios se desearon buena suerte de forma mutua para el Año del Buey e intercambiaron a fondo puntos de vista sobre los lazos China-EE. UU. y los principales asuntos internacionales y regionales.
Biden envió felicitaciones al pueblo chino por la Fiesta de la Primavera y le deseó un feliz y próspero Año Nuevo.
Xi, por su parte, felicitó, una vez más, a Biden por asumir el cargo de presidente de Estados Unidos y deseó a los pueblos chino y estadounidense un feliz y auspicioso Año del Buey.
Xi señaló que la restauración y el crecimiento de los lazos China-EE. UU. ha sido el acontecimiento más importante de las relaciones internacionales durante el último medio siglo y más.
A pesar de varios altibajos, agregó, la relación bilateral, en general, ha seguido avanzando y, además de reportar enormes beneficios a los pueblos de China y EE. UU., ha contribuido al mismo tiempo a la paz, la estabilidad y la prosperidad mundiales.
Según enfatizó, China y EE. UU. consiguen ganancias a través de la cooperación y se ven dañados por la confrontación, por lo que la cooperación es la única elección correcta de ambas partes.
A su juicio, China y EE. UU., cuando trabajan juntos, pueden contribuir mucho al bien de ambos países y del mundo en su conjunto. No obstante, el enfrentamiento entre ellos definitivamente será desastroso para ambos países y para el mundo.
Tras recalcar que la relación China-EE. UU. se encuentra actualmente en una coyuntura importante, Xi aseguró que ambos pueblos y la comunidad internacional desean presenciar el desarrollo sólido y estable de dichos lazos.
«Usted ha dicho que Estados Unidos se puede definir en una palabra: posibilidades. Esperamos por eso que las posibilidades apunten ahora hacia una mejora de las relaciones entre China y EE. UU.», dijo Xi a Biden.
Los dos países, sugirió, deben hacer esfuerzos conjuntos en la misma dirección, acatar el espíritu del no conflicto, la no confrontación, el respeto mutuo y la cooperación mutuamente beneficiosa, centrarse en la cooperación, gestionar sus diferencias y trabajar por el desarrollo sólido y estable de las relaciones chino-estadounidenses.
De esta manera, continuó Xi, pueden brindar beneficios más tangibles a la gente de ambos países y realizar su debida contribución a la lucha contra la pandemia de COVID-19, promoviendo la recuperación de la economía mundial y manteniendo la paz y la estabilidad regionales.
A ojos del mandatario chino, si bien las dos partes pueden diferenciar en opiniones respecto a algunos temas, es crucial mostrar respeto mutuo, tratarse como iguales y gestionar, de forma adecuada y constructiva, sus diferencias.
Los departamentos de asuntos exteriores de ambos países pueden comunicarse a fondo sobre una amplia gama de cuestiones en la relación bilateral, así como los principales temas internacionales y regionales, en tanto que las autoridades económicas, financieras, policiales y militares de China y EE. UU. también pueden llevar a cabo más contactos, puntualizó Xi.
China y EE. UU. deben restablecer diversos mecanismos de diálogo para entender, de manera precisa, las intenciones políticas del otro y evitar malentendidos y errores de cálculo, dijo Xi, y subrayó que es importante gestionar las diferencias cuando existan y buscar juntos la cooperación donde sea deseable.
La cuestión de Taiwan y los temas relacionados con Hong Kong y Xinjiang, entre otros, son asuntos internos de China y conciernen a la soberanía e integridad territorial del país asiático, ante lo cual la parte estadounidense debe respetar los intereses fundamentales de China y actuar con prudencia, enfatizó Xi.
De cara a una situación internacional sumamente incierta, señaló Xi, China y EE. UU. asumen responsabilidades y obligaciones internacionales especiales como miembros permanentes del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
Las dos partes, añadió, deben actuar para adaptarse a la tendencia mundial, salvaguardar juntas la paz y la estabilidad de la región de Asia y el Pacífico, y hacer contribuciones históricas para promover la paz y el desarrollo del mundo.
Según remarcó Biden, China tiene una larga historia y una gran cultura, y el pueblo chino también es un gran pueblo.
EE. UU. y China deben evitar conflictos y pueden trabajar juntos en torno al cambio climático y muchos otros temas, añadió.
La parte estadounidense, continuó, está preparada para tener un diálogo franco y constructivo con la parte china bajo el espíritu de respeto mutuo, mejorar así el entendimiento mutuo y evitar malentendidos y errores de cálculo.
Xi y Biden coincidieron en que su conversación telefónica de hoy enviará una señal positiva al mundo.
Ambos acordaron que las dos partes mantendrán una comunicación estrecha sobre las relaciones China-EE. UU. y asuntos de interés mutuo.
Fuente :China Xinhua