lunes, noviembre 25, 2024
spot_img
InicioOpinión¿Mujeres contra Mujeres?

¿Mujeres contra Mujeres?

Por Mayrelin García

La lucha que vivimos a diario las mujeres en diferentes espacios, pero mucho más aún en política, es un tema que lamentablemente no parece tener un final cercano. Luchamos para participar, para abrirnos espacios y demostrar nuestras capacidades, para hacernos comprender en nuestros entornos familiares cuando el apoyo falta, y también para desafiar al patriarcado y al machismo dentro de nuestras organizaciones políticas. Sin embargo, es triste admitir que, a veces, también tenemos que luchar contra nosotras mismas.

Ha costado sangre, lágrimas y generaciones enteras de mujeres valientes que han enfrentado el sistema para que hoy podamos disfrutar de derechos y libertades que antes se nos negaban: estudiar, trabajar, votar, tomar decisiones y participar activamente en política. Y aunque hemos avanzado enormemente, la sororidad, ese principio que nos invita a apoyarnos mutuamente, no siempre está presente en nuestros espacios o cuando lo está porque es un “discurso sexi” para caer bien de momento, para abanderarnos de que luchamos por nosotras y no entre nosotras, se usa estratégicamente como narrativa para las masas, para la prensa, para las redes y las fotos. Es un discurso hipócrita y vacío cuando se asume con cara de mansa oveja para dar falsas profecías.

En política, es común ver cómo las mujeres enfrentamos críticas mucho más severas de otras mujeres que de los hombres mismos. Comentarios que descalifican o que ponen en duda nuestras capacidades o que cuestionan nuestras ambiciones no solo vienen del machismo estructural, sino, a menudo, de “compañeras” que deberían estar sino caminando a nuestro lado, al menos no atacándonos, con esos ataques a veces frontales y otras veces sutiles. Esto no solo es desalentador para nuestro género, para las mujeres que nos acompañan y nos siguen, para las jóvenes que nos ven como ejemplos a seguir o como inspiración para participar en política, sino también contraproducente con nuestras pares no solo de nuestro partido en particular, sino de todo el sistema político.

El patriarcado ha sido hábil para dividirnos. Nos ha hecho creer que hay lugar solo para unas pocas, que la competencia entre nosotras es inevitable y que destacar significa necesariamente opacar a otra. Pero esta mentalidad es un obstáculo para el verdadero cambio. Si seguimos enfrentándonos entre nosotras, estamos haciendo el trabajo del patriarcado por nosotras mismas, perpetuando un sistema que nos oprime o es que tal vez algunas piensan que si obstruyo a la otra, ellas pueden tener ahora o en el futuro igual o mejor oportunidad que la compañera.

Yo conozco de primera mano lo que significa que otra mujer, incluso alguien que creíste tu amiga, intente cerrarte todas las puertas simplemente porque te percibe como una potencial competencia para sus propios intereses. Es desgarrador darse cuenta de que, después de utilizarte para alcanzar sus objetivos, trate de dañarte temiendo que tu éxito pueda opacar el suyo. Este tipo de comportamiento no solo nos lastima individualmente, sino que retrasa el avance colectivo de las mujeres en política, un espacio donde el apoyo mutuo debería ser nuestra mayor fortaleza.

Es hora de reconocer que cada mujer que asciende en política abre la puerta para muchas más. El éxito de otra mujer no nos disminuye, nos fortalece. Necesitamos ser aliadas, no rivales, al menos permanecer neutras sino hacemos equipo. Es fundamental dejar de vernos como competidoras y empezar a construir juntas. La igualdad de género no será alcanzada mientras sigamos permitiendo que el sistema nos divida, y peor aún, que nosotras mismas dividamos para restarle a otra mujer.

Apoyémonos en nuestras diferencias, celebremos los logros de nuestras compañeras y entendamos que el verdadero cambio no será posible hasta que todas estemos dispuestas a alzar nuestras voces en un solo coro, como una sola voz. Porque solo juntas podremos romper los techos de cristal que aún nos limitan, y solo juntas lograremos que más mujeres lleguen a espacios de poder para transformar verdaderamente nuestras sociedades.

Most Popular

Recent Comments